La cama era super cómoda, con un duvet de plumas y muchas almohadas. El desayuno estaba muy rico, te sirven tortitas y huevos hechos al momento. La ubicación es perfecta, en el centro de la zona antigua.

mi estancia fue decepcionante. la ducha sin privacidad, una vergüenza absoluta. el ascensor no llegaba a nuestro piso, así que subí las maletas a mano, como si estuviera en una película de terror. esperaba un gesto de cortesía, pero ni siquiera un chocolate me ofrecieron. casi dejo una buena reseña, pero no pude.

Aprovecha la terraza del hotel para disfrutar del desayuno al aire libre, es un buen comienzo para el día.

Desayuno delicioso con tortitas y huevos al momento.

Los elementos decorativos en la habitación, como los baules usados como mesas, le dan un toque original muy agradable. El desayuno en la terraza durante el verano fue bastante completo y disfruté del ambiente.

Tuvimos que subir las maletas por las escaleras hasta el último piso ya que el ascensor no llega, lo que no es muy cómodo. La falta de privacidad en la ducha acristalada fue un poco incómoda y el garaje estaba aparte, lo cual debería indicarse de forma más clara.

Un desayuno para recordar

El desayuno fue realmente sobresaliente, con variedad de opciones y un espresso delicioso. La ubicación es ideal, haciendo fácil explorar la hermosa ciudad antigua de Innsbruck.

Sin embargo, la ducha acristalada no ofrece privacidad y el ascensor no llega a todas las plantas, lo que puede resultar incómodo al cargar maletas.

La cama era super cómoda, con un duvet de plumas y muchas almohadas. El personal en el comedor fue realmente amable, me sirvieron la cena justo antes de cerrar. La ubicación es perfecta, muy cerca de los lugares de interés del casco antiguo. El diseño de la habitación era único y agradable, y me gustó mucho el desayuno que ofrecían en la terraza.

Lo puedo recomendar.

no se pierdan el desayuno fresco de omelet mientras disfrutan del ambiente tranquilo del bar y la atención excepcional del personal

La ubicación es ideal, a un paso de todo. El desayuno es increíble, con opciones frescas y la atención del personal te hace sentir como en casa. Las habitaciones son tranquilas y acogedoras. Sin duda, un lugar para volver.

Ubicación increíble, a pasos de todo lo bonito del centro. La habitación, una chulada, bien limpia y cómoda. El desayuno muy sabroso, aunque me faltaron opciones de fruta. El personal bien buena onda, siempre atentos. Regresaría sin pensarlo.